Para esta segunda y última entrega de Villamil en el cine, les traemos dos películas más en las cuales la música del maestro Jorge Villamil Cordovez, es protagonista.
La primera de ellas es una película al mejor estilo de los filmes del oeste norteamericano. Con haciendas, paisajes desérticos, bandidos, caballos, muchas pistolas, amoríos y traiciones.
Se trata de la película Ahora mis pistolas Hablan. Una producción México – Colombia dirigida por Rómulo Delgado de 1982. Cuenta la historia de un humilde granjero, Camilo, que comienza a trabajar para un grupo de maleantes. En una de sus fechorías asaltan el transporte de valores de una ciudad. A Camilo se le encarga guardar el botín compuesto por una bolsa de monedas de oro. Pero es denunciado por el cabecilla de la banda, llevado a prisión. Al salir de prisión, le corta le lengua para que no pueda decirle a nadie dónde guardó las monedas, le quita la novia. Pero al final viene la venganza, donde ahora las que pueden hablar, son las pistolas de Camilo.
La segunda película fue un éxito en el Huila y en toda Colombia. Se trata de la producción El Embajador de la India, una comedia inspirada en hechos reales ocurrida en la ciudad de Neiva. Historia sobre la cual Jorge Villamil tuvo la creatividad e ingenio de componer una pieza musical al estilo de crónica, llena de toda la picardía y profunda captura del sentir huilense que también quedó plasmado en esta divertida cinta.
Es bien conocida ahora en Neiva y en todo el Huila, la historia de un personaje de nacionalidad colombina y originario del municipio de Yaguará, que sin buscarlo intencionalmente, se hizo pasar por el Embajador de la India, por lo cual recibió todos los honores y atenciones, que un representante diplomático podría recibir por parte de las directivas locales en una ciudad de provincia a principios de los años 60, atenciones y adulaciones exageradas que los colombianos acostumbrados a rendir ante figuras extrajeras.
Se le rindieron ceremonias oficiales, le presentaron a las mujeres jóvenes en “edad de merecer”, fue hospedado en el famoso hotel Plaza, en el centro de la ciudad. Lo llevaron a conocer algunos lugares de Neiva y del departamento.
Finalmente el personaje resulto ser un ex seminarista, de nombre Jaime Torres Holguín reconocido por uno de sus compañeros. Fue detenido, pero realmente no había cargos por los cuales acusársele, pues, entre otras cosas, no podía haber suplantado un cargo que no existía, dado que Colombia no tenía relaciones diplomáticas con la India en ese entonces.
Guillermo Plazas Alcid, destacado dirigente del partido Liberal colombiano, para la época califico el hecho como la consecuencia de una “falta de visión, escasez de prudencia, mentalidad yérmica, cortesía frívola y la espesa ignorancia que distingue a nuestra empinada élite.”
Las primeras dos estrofas de la canción dicen:
Señores, voy a contarles lo que en Neiva sucedió,
señores, voy a contarles lo que en Neiva sucedió
que ha llegado de la India un supuesto Embajador,
que ha llegado de la India un supuesto Embajador.
Por todas partes practican el yoga y genuflexión,
los Ferros y los Solanos y el señor gobernador.
Calcuta, Calcuta, ahí vuelve el Embajador,
Sumatra, Sumatra, contesta el gobernador.
Como en todas las canciones del maestro Villamil en las que se relatan hechos reales, los personajes mencionados también lo son. En El Embajador podemos encontrar toda la clase social que fue protagonista de la vacuidad del acontecimiento. Los Ferro y los Solanos, por ejemplo fueron familias que protagonizaron las atenciones el supuesto embajador. Más adelante se menciona a Oliverio Lara, importante empresario, José pepe Rivas, Comandante de batallón; Cacibas, un médico de la época; El Sapo, el poeta Miguel Ángel Villoría, entre otros.
La película del mismo nombre es de 1986 y fue dirigida por Mario Rivero, con guion de Mario Gómez y las actuaciones Hugo Gómez, en el papel del embajador y de Olga Lucía Alvira, José María Arzuaga, Martha Arévalo, Rafael Bohórquez, entre otros. La película fue grabada en Neiva, el desierto de la Tatacóa y otras regiones cercanas a Neiva. También hay una interesante escena en el parque arqueológico de San Agustín, aunque en los hechos reales, el supuesto embajador no fue llevado hasta allí. Tanto la canción como la película recogen con fidelidad este bochornoso acontecimiento ocurrido en la ciudad de Neiva. La canción es interpretada por Emeterio y Felipe, los Tolimenses.
Enlaces Externos
El Embajador de la India
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El Embajador de la India. Película completa remasterizada.
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